Puntos interesantes sobre cómo es la estructura de un edificio corporativo con tiendas comerciales.
Trabajar y disfrutar de la vida en las grandes ciudades resulta cada vez más complicado: el número de personas va en aumento, el insoportable tráfico se intensifica y el estrés laboral hace presión en el estilo de vida de las personas. La tendencia para hacer desarrollos mixtos que mejoren la manera en cómo pasamos el tiempo en la ciudad está evolucionando a pasos agigantados, y como gran ejemplo de esto tenemos los edificios corporativos con tiendas comerciales que están apareciendo por toda la ciudad recientemente. Lo que antes parecería una idea extraña, ahora la estructura de un edificio es un interesante concepto que trae un buen número de beneficios y ayuda a simplificar la vida de los trabajadores.
- Promover el fácil acceso – La gran clave del éxito para integrar las tiendas comerciales recae en la ubicación. Una correcta distribución en la estructura de las oficinas debe garantizar que el acceso a los locales sea lo más fácil posible, ya sea de camino al corporativo o en algún lugar que se encuentre dentro de la ruta natural de acceso o salida del inmueble. Muchos corporativos optan por dedicar una sección específica dentro de alguno de los pisos u ocupar espacios aledaños a la planta baja para que sea mucho más atractivo.
- Modelo de negocios flexible – Los trabajadores forman parte de un segmento de mercado muy flexible y amplio, al cual le pueden resultar atractivas varias opciones para poder ser consideradas dentro de las tiendas comerciales. Empresas relacionadas con el consumo de alimentos, deportes o entrenamiento físico, seguros, e inclusive productos de estilo de vida o viajes pueden ser una gran opción para poder incorporarse de manera fácil al lugar.
- Diversificación de ingresos – En ocasiones, la realidad de un edificio corporativo es que por sí solo puede tener épocas complicadas para llegar a ser rentable y genera gastos fijos importantes. Abrir la opción de contar con tiendas comerciales dentro de la estructura de un edificio genera un nuevo flujo de ingresos que llegará de manera mensual y se puede ir ajustando año con año con respecto a la inflación y objetivos de negocio propios para el local.
Poder tener un desarrollo mixto que diversifique la propuesta de valor resultará definitivamente en un mayor atractivo para inversionistas. Los edificios corporativos seguirán evolucionando para acomodarse a las necesidades de sus trabajadores y con ello, vendrán cambios importantes en el diseño de la estructura de un edificio y las estrategias comerciales para hacer este espacio de trabajo más rentable.